El eternauta en mis recuerdos



Acostumbraba a subir al mandarino del fondo de mi casa con una almohada y un libro y ubicarme sobre una horqueta formada por sus ramas.



Escondida bajo el follaje, llevaba para  leer El eternauta y mis ojos, atrapados por la historia, se volvían los ojos del tiempo, del misterio y de la duda que aun hoy, a mis años, no he logrado dilucidar.

Con ese eternauta en mi pecho que llega de un largo viaje por mis recuerdos, nostálgica y sin pretender ser como Oesterheld ni Solano Lopez ni mucho menos como Juan Salvo, aguardo esperanzada que se abra una ventana por la cual verme, niña aun, deseando encontrar ese túnel por el que viajaría a insólitas aventuras, pero solo veo una larga pared de ladrillos, dos o tres árboles que se agitan con el viento... el alumbrado público... la solitaria calle, y de tanto en tanto el ladrido de algún perro que me vuelve a mi realidad, a mi tiempo,  a Mi Hoy... y al regresar, abruptamente descubro que el tiempo, ese tiempo que tanto me inquieta, que escapa de mis manos esfumándose, alejándose para no regresar, no tiene principio ni tiene final; es eterno, tan eterno como aquel eternauta de mi infancia que vive en mi imaginación y siento tan real.

Aun hoy sigue navegando en todos mis espacios emocionales.



El eternauta en mis recuerdos
Cristina Leiva - Cris, Lacarancha


Los Ellos - "Disco compilado homenaje a El Eternauta"   

 (Álbum Completo) - CCL005








No hay comentarios:

Publicar un comentario

Lectores opinando