Faltaban
pocos días para las fiestas decembrinas.
Un
hermoso arbolito navideño precedía la entrada: era muy alto, de hojas verdes y una
enorme estrella en la punta cargado de bolitas multicolores y guirnaldas
doradas acompañaban el recorrido envolvente de pequeñas lucecitas intermitentes
que con su brillo, parecían iluminar toda la noche.
Todos
los niños del barrio bailaban villancicos ofrendando su alegría ante el pequeño
pesebre que Airún había armado con mucha ilusión.
Fue allí donde conoció a Airun?. El momento
exacto se hallaba un poco desdibujado en
su memoria. En realidad nadie sabía en
que ocasión, ella había comenzado a formar parte de sus vidas pero Sirc quería recordar
ese instante e hizo un gran esfuerzo apelando a todos sus poderes para que
ellos regresaran a su mente.
En
aquella época los rumores sobre su llegada corrían por las calles en susurros
alocados, coloridos, musicales, contando al viento cientos de historias pero en
realidad, ella, Sirc, era la única que conocía la verdad.
Una
cálida noche, Sirc se conectaba con el mismo universo sentada bajo las estrellas,
en una lomada apartada de todas las miradas tocando con su saxo melancólicas
melodías que hablaban de su soledad. Las tocaba tan bajito como para que solo
ella, la luna, pudiera oírla.
De
repente un fulgurante rayo de luz iluminó la noche y el sonido de una voz
alegre y divertida quebró el silencio.
-
Hola
Sirc, Le dijo. -Siempre te escucho
cuando al anochecer, sales a mandarme musicales mensajes contándome de tus
penas, tus alegrías, tus proyectos, y yo, te cuento también los míos.
Soy Airun. Hija de la luna, tejedora
de sueños, y he llegado a ti enviada por mi madre, conmovida por la música que
sale de tu corazón, para ser tu amiga. .. tu hermana. Ya no estarás sola… ya no
estaré sola…
Sé
que no lo recuerdas pero ambas hemos nacido, hace muchos eones de la imaginación generosa de un Náhuatl
enamorado de mi Nan-tzin, la luna, de tu Nan-tzin, la tierra, pero el tiempo no transcurre para
nosotras en la misma dimensión que para el resto de los mortales; es por eso que hoy este rayo de luz me trajo
hasta ti para quedarme a tu lado por la eternidad, y juntas, iremos tejiendo
esos sueños que cada uno de los hombres y mujeres de bien quieren alcanzar_________________
Cuenta
la leyenda… ¿Será una leyenda en realidad o será la pura verdad de la
existencia que no nos atrevemos a imaginar,
que Airun y Sirc salen en las noche de luna cuando todos duermen tejiendo
niditos de sueños que dejan en el corazón de los durmientes y en él, pichoncitos de gorriones que el soñador
alimenta día y noche hasta que despierta a su novena conciencia y es entonces cuando sus pájaros, echan a
volar.
Nahual o nagual,1
(en náhuatl: nahualli, ‘oculto,
escondido, disfraz’)?,Nota 1
dentro de las creencias mesoamericanas, es una especie de brujo o ser
sobrenatural que tiene la capacidad de tomar forma animal. El término refiere
tanto a la persona que tiene esa capacidad como al animal mismo que hace las
veces de su alter ego o
animal tutela
Nan tzin del idioma Náhuatl = que significa en español, Madrecita.
Airun, Sirc y el nacimiento de su historia
Cristina Leiva - Cris, Lacarancha
Cristina Leiva - Cris, Lacarancha
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